Fieles a su estilo han dado un paso más en su trayectoria, ya que esta colección es mucho más actual y arriesgada de lo que nos tienen acostumbrados, mantienen su aire romántico y retro, pero le dan un toque más agresivo y funcional con prendas de cierto toque militar.
Inspirada en las jóvenes estudiantes de música clásica, además de la riqueza de sus tejidos y la amplia paleta de color debemos destacar sus bolsos, que han nacido, nuevamente, de la colaboración con la marca madrileña Hazel.
Las carteras vintage, rígidas, en diferentes materiales como el cuero repujado y la piel de grabado de serpiente, se mezclan con los bolsos bandolera acolchados en ante y cuero, de aspecto romántico.







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